Centros de datos hospitalarios: desafíos en el camino hacia un futuro mejor
Los sistemas de datos sanitarios son muy complejos porque deben gestionar los exigentes entornos de trabajo de los hospitales. El personal médico y la administración del hospital necesitan acceso directo a una gran cantidad de servicios en todo momento, incluyendo historiales clínicos electrónicos (HCE). Por lo tanto, los centros de datos médicos necesitan herramientas analíticas sofisticadas que pronostiquen las necesidades de personal con semanas de antelación. Las tecnologías ayudan a los hospitales a mejorar la calidad de la atención sanitaria optimizando la coordinación del personal.

Centros de datos físicos vs. la nube
A partir de 2020, los hospitales utilizan tanto centros de datos físicos como la nube, y ambos ofrecen ventajas. Los centros físicos ubicados en el campus de una clínica suelen ofrecer una velocidad de rendimiento superior, lo cual resulta útil para la recopilación de imágenes médicas. Además, los centros de datos físicos son importantes para los centros médicos que utilizan sus propias aplicaciones heredadas. Estas aplicaciones están obsoletas y se consideran un punto débil en las organizaciones sanitarias, ya que hacen que los servidores hospitalarios sean vulnerables a ciberataques. Aun así, debido a la falta de financiación, muchos hospitales tienen que gestionar estas aplicaciones, y es aquí donde un centro de datos físico resulta muy útil.
Los sistemas en la nube probablemente representan el futuro de los datos hospitalarios, pero existen muchos desafíos al intentar reconstruir las tecnologías en los hospitales estadounidenses. Con frecuencia, el personal no está preparado para optar por soluciones en la nube en lugar de centros de datos físicos debido a la gran confusión sobre sus implicaciones. Sin embargo, la nube es una opción flexible y escalable que se adapta a las demandas actuales del sector médico.
Cuando los hospitales invierten en centros de datos físicos tradicionales, deben calcular sus necesidades de almacenamiento físico durante años. Muchos gerentes de hospitales reportan problemas con el tamaño de sus centros de datos físicos. Con la nube, pueden adquirir el espacio que necesitan al momento y actualizarlo cuando sus necesidades cambien. Esto facilita prácticas de planificación de datos más realistas, que los hospitales pueden mantener sin sacrificar sus finanzas ni los recursos que quedan sin utilizar en caso de ineficiencia de los centros de datos físicos. Además, el equipo de los centros de datos físicos suele desgastarse, lo que requiere una reinversión que muchos hospitales no tienen.
Factores a considerar al migrar a la nube
La nube puede parecer la solución perfecta a los problemas que presentan los centros de datos físicos. Sin embargo, migrar a la nube requiere una preparación rigurosa. En primer lugar, los hospitales deben elegir un proveedor de nube legítimo que satisfaga todas sus necesidades de datos y cumpla con las exigencias de seguridad. En segundo lugar, deben desarrollar una estrategia que los proteja adecuadamente de posibles ciberataques. La filtración de datos puede ser una grave preocupación al migrar a la computación en la nube, y las historias de violaciones de la privacidad surgen con demasiada frecuencia. Casi el 50 % de las filtraciones graves de seguridad de datos se registran en el sector médico, y los dispositivos personales conectados a redes inalámbricas son una de las principales razones.
Por motivos de seguridad, los proveedores de servicios en la nube deben obtener certificaciones adicionales al trabajar con hospitales. Es fundamental que las clínicas elijan servicios en la nube con certificación HIPAA e IDC. Otro factor a considerar al elegir un proveedor es si ofrece recuperación ante desastres y copias de seguridad. Cuanto menor sea la financiación del hospital, mayor será la probabilidad de migrar a la nube. El mantenimiento de los centros de datos físicos es costoso, mientras que los servicios en la nube suelen ofrecer descuentos a las organizaciones sanitarias. Por lo tanto, es probable que los centros médicos independientes inicien el proceso de migración a la nube mucho más rápido.
¿Qué tienen para ofrecer los proveedores?
Varias empresas de confianza en el mercado ofrecen soluciones en la nube específicas para hospitales y organizaciones sanitarias en general, incluyendo proveedores de la competencia como Microsoft Azure y AWS. Sus servicios están certificados según los estándares de los centros de datos médicos. Microsoft Azure permite conectar datos sanitarios de múltiples fuentes en una única nube. La tecnología IoT de la empresa ofrece mayor seguridad para las operaciones clínicas. La nube de Azure almacena los datos de los pacientes en formato FHIR, compatible con las principales aplicaciones de primera línea. El proveedor de la nube también ofrece herramientas analíticas empresariales adicionales. Los socios con competencia en salud de AWS también ofrecen métodos eficaces para almacenar datos clínicos. AWS crea soluciones de nube de datos clínicos personales para sistemas de información clínica, análisis de salud, administraciones sanitarias y servicios de cumplimiento normativo.
Empresas menos conocidas también ofrecen soluciones en la nube para hospitales. Existen servicios en la nube en el mercado diseñados exclusivamente para hospitales y otros centros médicos. Algunas empresas ofrecen a los hospitales ayuda para mejorar la eficiencia de sus centros de datos. Los servicios incluyen mejorar la ventilación, eliminar cables infrautilizados y optimizar el uso del espacio.
Soluciones híbridas: mirando hacia el futuro
Algunos ejecutivos del sector salud se muestran escépticos sobre el futuro de los centros de datos físicos y pronostican una transición completa a las tecnologías en la nube, incluso tras décadas de gestión exitosa de centros de datos físicos. Su postura radical tiene algo de cierto, pero el futuro real podría no implicar el fin de los centros de datos físicos.
Quizás la mejor estrategia para los hospitales en la década de 2020 sea una solución híbrida que combine un centro de datos físico personal para lo esencial y la conexión de la infraestructura a la nube, y la nube para todo lo demás. Esta opción permite obtener lo mejor de ambos mundos, a la vez que se ahorran costos significativamente. Las soluciones híbridas también ofrecen una capa adicional de flexibilidad. Por ejemplo, un hospital puede almacenar algunos archivos en la nube a largo plazo si no se necesitan de inmediato. Si estos archivos se requieren repentinamente a diario, se pueden transferir de vuelta a las instalaciones físicas. En definitiva, las necesidades específicas de cada organización sanitaria son lo que importa a la hora de elegir las soluciones de datos adecuadas. En el futuro, se dispondrá de herramientas analíticas más sofisticadas para respaldar la medicina personalizada, tanto en los centros de datos físicos como en la nube.
¿Qué pasa con el cableado?
Las soluciones de cableado en los centros de datos físicos del hospital varían considerablemente. Algunas clínicas utilizan sus propias redes de fibra óptica. Sin embargo, la realidad es que la fibra suele ser una solución demasiado cara para los centros médicos. Muchos hospitales consideran que las redes de fibra óptica hasta la oficina (FTTO), que combinan cables de fibra y cables de cobre, son la mejor solución, ya que ofrecen una excelente combinación con numerosas ventajas. Las redes FTTO son seguras, escalables y flexibles. No menos importante es su larga vida útil y su mantenimiento relativamente económico.
Nassau National Cable ofrece soluciones de cableado de cobre y fibra para centros de datos hospitalarios. Entre otros cables compatibles, ofrecemos cables THHN, THWN-2 , cables de bandeja y cables tipo W , totalmente certificados y listos para usar en centros de datos hospitalarios.
COVID-19: Un obstáculo imprevisto que hay que superar
La eficiencia de los centros de datos hospitalarios es crucial en tiempos de epidemias de COVID-19. Se necesita un mantenimiento eficaz de los datos en los hospitales para informar las estadísticas al Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. La Casa Blanca exige que todos los centros de pruebas informen los resultados a las 5 p. m., hora del este, para actualizar la información a tiempo y llegar en consecuencia. Además, los hospitales necesitan herramientas potentes para garantizar un mantenimiento adecuado del personal en estos tiempos difíciles. Algunos hospitales que dependen únicamente de centros de datos físicos pueden tener hardware o software obsoleto que les impide gestionar eficazmente las tecnologías que ayudan a afrontar la epidemia de COVID-19. Algunos servidores pueden ser demasiado débiles para mantenerse al día con la creciente presión ante las pandemias. La redundancia de conmutación por error de energía y el control de temperatura son cruciales para mantener los centros de datos en funcionamiento bajo una presión tan enorme.
Los gigantes tecnológicos intervienen para ayudar a contener el brote de epidemias. En el Reino Unido, Microsoft anunció su apoyo a la iniciativa del Servicio Nacional de Salud (NHS) para crear una fuente de datos centralizada. Microsoft colaborará con otras empresas tecnológicas como Google y Amazon en esta iniciativa. Algunos de los resultados esperados son la rápida entrega de respiradores a los hospitales antes de que se saturen.
Además, los centros de datos hospitalarios pueden enfrentar escasez de personal debido al creciente número de especialistas que deben aislarse u hospitalizarse debido a la pandemia. Existe el riesgo de escasez de personal cualificado entre quienes reemplazarán al personal afectado por la COVID-19. Sin embargo, este último problema no es exclusivo de los centros de datos hospitalarios. Los centros de datos de los proveedores de servicios en la nube también enfrentan problemas relacionados con la pandemia de coronavirus. En la próxima entrada del blog, nos centraremos en los problemas generales que enfrentan los centros de datos ante la pandemia mundial y la crisis económica que esta ha provocado.
